lunes, 24 de febrero de 2014

Feliz cumpleaños

Hoy habrías cumplido 79 años. Te fuiste demasiado pronto. Me habría gustado compartir mucho más contigo, poderte haber recogido el testigo de la responsabilidad de la familia de tus manos y regalarte un retiro dorado en el que tu adiós fuera un precioso y lento anochecer. El cáncer trajo la anoche abrupta.

Ahora es Haizea la que se muere de lo mismo que tú, me dieron la noticia el día que cumplí cuatro décadas de vida. Tú tuviste tarde a tus hijos, yo aún no los tengo. Sólo estos dos pequeños que me han acompañado desde que empecé a dejar de soñar que era escritor. En algún momento a finales del siglo pasado debí decidir que soñar era para otros aunque me reservaba el derecho a decir que seguía soñando. En algún momento debí decidir que quería vivir una vida normal, sin estridencias.

Pues no sirvió de nada. Probablemente estoy más cerca de mi muerte que de mi nacimiento pero cada día que pasa algo dentro de mí sigue diciendo que aún estoy a tiempo de que lo que sueño y lo que vivo se entremezcle. Aún sigo sintiendo dolor y alegría con una intensidad que desgarra cada hora que estoy vivo. No estoy hecho para saber cómo va a ser mi vida el año que viene, el mes que viene.

Creo que nunca te hablé de Toron, un sacerdote de Yenom en el que te veo con un cariño que roza el infantilismo. Creo que le habrías cogido mucho cariño si hubieras podido leer Yenom una vez terminada. No será así pero en mi cabeza te veré haciéndolo y sé qué sabrás todo aquello que no digo pero implico.

Haizea se muere y sé que lo sabe porque me dice que siente mi cariño, que sabe que estoy haciendo lo imposible por que el tiempo que le queda lo viva siendo feliz. No puedo hacer nada más por ella y me arde el alma por ello. Tampoco pude hacerlo por ti. Es la mayor cura de humildad que jamás pude soñar. Sólo soy dueño de lo que hago con mi vida.Y da igual que sueñe, reze o haga. El agua de vuestras vidas se escurre entre mis dedos.

Me rodean tus libros en lo que fue tu despacho; ahora es mío y a ratos te lo usurpo y a otros nunca has existido.

Mentira. Sólo te lo usurpo. A ratos.